Carolina Ramírez, directora de Experiencia del Cliente para Sudamérica en General Motors, comparte una anécdota sorprendente.
Un día fue a un restaurante donde todo iba perfecto hasta que pidió el postre… y le supo a cloro. Lo comentó con el mesero, quien simplemente tomó nota y se fue. Nada extraordinario.
Pero dos semanas después, al volver al restaurante, alguien del equipo se le acercó y le dijo:
👉 “Gracias a su comentario hemos cambiado el protocolo de lavado de frutas”.
💡 Esa es la diferencia entre solo escuchar y realmente actuar sobre la voz del cliente.
Porque tomar nota no basta: hay que hacer cambios y comunicarle al cliente que su voz generó impacto. Eso es CX en acción.
Mira la entrevista completa a Carolina en Spotify y Youtube.
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